Con una buena preparación, intención, voluntad, y ganas como las que puso Maria en que esta celebración fuese un éxito, era imposible que saliese de otra manera, pero además, el buen ambiente que hubo, fue digno de admirar.
Creo que con una buena representación de todos los grupos de sevillanas que estamos en la Ribera, y sin olvidar Tarazona, y Ejea, comenzó una cena abundante y rica, que nos preparó para las intensas horas de baile que después compartimos, nada mas y nada menos que hasta las cinco de la mañana, estuvimos los mas pendones de cada casa dandonos el gustazo de no parar de hacer lo que tanto nos gusta.
La cena buena, los participantes eufóricos y el ambiente pues de lo mejorcito, asi que creo que todos debemos darnos la enhorabuena porque asi fuera y mandarle un besito a Maria que puede sentirse orgullosa de que su esfuerzo e ilusión, se vieran plenamente cumplidos.
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